Cuando a Dios lo debe proteger un robot

Los shows de televisión se han convertido en una enorme fuente de gags cinematográficos. Estos tienen tal fuerza narrativa que son entendibles independientemente de si se ha visto o no la película a la que se refieren.

Es el caso del que continúa. Dos personajes, Jesús y Terminator- con más de dos mil años de diferencia en sus respectivas existencias-, se entrelazan y conforman una secuencia realmente divertida: "La historia de acción más grande jamás contada". Thank you, Mad TV.

No hay comentarios: